Durante el conflicto gobierno - campo hubieron consecuencias de las que pocos hablan.
En principio se cortó la cadena de pagos.
¿Quién la cortó?
El Estado, en sus versiones nacional, provincial y/o municipal.
Me confortaría que el periodismo investigara cuántas cuentas bancarias cayeron durante estos últimos noventa días mostrando cómo el mismo Estado que no paga, cobra las multas por los cheques rechazados, dejando a la vista de todos un desfasaje social de compartimentos estancos donde el "sálvese quien pueda" es la lamentable premisa. Mientras tanto, los medios de comunicación siguen perdiendo el tiempo de su peculiar "libertad de empresa" mostrándonos lo pintoresco, para no adentrarse en lo profundo.
¿Qué está pasando con los proveedores estatales?
Deben cumplir con los pliegues licitados en tiempo y forma para tener derecho a cobrar.
¿Están cobrando regularmente?
Más allá de toda justificación, el lazo comercial con el Estado representa obligaciones unilaterales. Una vez que el particular cumplió en tiempo y forma con su contrato, la otra parte se toma todo el tiempo político para abonarla.
Es paradójico que el Estado seamos todos. Es como la enfermedad que nos termina atacando con nuestros propios recursos.
La Constitución dice: "Todos somos iguales ante la Ley"
¿Somos iguales ante la Ley?
¡No!
La justicia tiene tiempos disímiles. Los juicios por "apremio" lo demuestran claramente, definen cómo el Congreso elegido por todos nosotros termina siendo una herramienta que nos ataca en lugar de defendernos.
No se puede vulnerar desde ningún "Poder" el espíritu de la Constitución Nacional, pero si en algunos ámbitos no somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario, estamos construyendo una sociedad injusta donde la inequidad hace alarde y donde los sectores más desprotegidos no tienen las posibilidades mínimas.
Las carpas, criticadas otrora, en el presente crecen como hongos.
Desde la, hoy inocente, carpa docente, hasta la verde del campo, pasando por la "K".
No son otra cosa que exhibicionismo de poder. Se miden como dice Serrat "a ver quien es el que la tiene más larga". Están ahí para defender privilegios sectoriales, supremacías de unos sobre otros. Importa poco la vanidad que ostentan o los niveles de impunidad que consolidan porque hace mucho tiempo que perdieron el respeto por el pueblo argentino.